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LA INTERACCIÓN ENTRE NUESTRO ADN Y EL AMBIENTE

LA INTERACCIÓN ENTRE NUESTRO ADN Y EL AMBIENTE

DR. JORGE ALEJANDRO ALEGRÍA TORRES

DOCTOR EN CIENCIAS AMBIENTALES

UNIVERSIDAD DE GUANAJUATO, DEPTO.  DE FARMACIA

Foro Cultural 81, Pósitos 81,  Zona Centro Historico

Martes enero 30, 2018, a las 18:00 hrs

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Resumen: 
La genética es la parte de la biología que estudia la herencia y los mecanismos que regulan la transmisión de la información de padres a hijos. La información genética de cada individuo está contenida en la molécula de ADN, la cual es una estructura en doble hélice que se encuentra en el núcleo de cada una de nuestras células. El ADN es una secuencia continua de pequeñas moléculas llamadas nucleótidos, a su vez, esta secuencia se organiza en unidades que pueden expresarse, y son los llamados genes. A toda la colección de genes de un individuo se le denomina genoma. La expresión de los genes es un proceso altamente regulado en el que intervienen factores intrínsecos (propios del organismo, como la herencia), así como extrínsecos (externos), refiriéndose estos últimos principalmente a factores ambientales como, por ejemplo: la dieta, algunos contaminantes e incluso el estilo de vida.

Las modificaciones que sufre el genoma pueden ser de tipo químicas, y con carácter reversible y heredable, es decir, que el impacto sobre el mismo puede repararse y pasar de generación en generación. La modificación química del ADN mejor estudiada es la metilación, proceso que implica un cambio en la organización espacial por la adición de grupos metilo, teniendo efectos sobre la expresión de los genes; así tenemos que genes con menor nivel de metilación tienden a expresarse más, y por el contrario, genes muy metilados se expresan menos o se suprime su expresión, de esta manera se da el silenciamiento genético y la expresión diferencial de los genes de tal modo que la queratina que las uñas se produzca precisamente en éstas y no en el hígado. Existe un balance en el grado de metilación del ADN, y su desequilibrio origina inestabilidad genómica, conllevando a un riesgo de desarrollar enfermedades como el cáncer.